Cirque du Soleil cautiva a millones de espectadores de todo el mundo cada año con temáticas distintas, desde las musicales como la reimaginación de la música de The Beatles en el espectáculo “Love” o “Sép7imo Día: No Descansaré”, inspirado en la icónica música de la banda argentina de rock Soda Stereo, por sólo mencionar dos de sus grandes producciones, pero en Navidad, tiene un único espectáculo.
Se trata de “Twas the Night Before…”, espectáculo inspirado en el poema clásico “Una visita de San Nicolás” de Clement Clarke Moore; la historia del espectáculo de Cirque trata sobre Isabela, una joven hastiada que redescubre la magia de las fiestas.
Dirigido por James Hadley, “Twas the Night Before…” es definido como una explosión festiva de amor y alegría creada especialmente para familias, que presenta las increíbles acrobacias que caracterizan al Cirque du Soleil: desde un fascinante dúo de correas aéreas y atrevidos saltos con aro, hasta suspensiones capilares que desafían la gravedad y bailes vibrantes, interpretados por un elenco de 26 artistas de todo el mundo.
Una de las artistas es Valeria Cruz Colón, originaria de Las Vegas, Nevada, y que en Chicago fue alumna del Hubbard Street Professional Program (2019–2020). Para Valeria, bailarina profesional con formación en danza clásica y contemporánea, ser parte de un espectáculo de Cirque du Soleil es todo un regalo, ya que creció viendo sus shows.
“Regresando a casa después de Chicago y revalorando lo que quería hacer, recordé todos esos espectáculos que vi y me inspiraron, y quise ir en busca de que fuera algo tangible”, contó Cruz Colón en entrevista con La Voz.
Uno de esos espectáculos fue “Mystère”, uno de los más antiguos de Cirque du Soleil y que, hasta la fecha, sigue en cartelera; de ahí que Cruz Colón decidiera audicionar para la compañía y, en su sexta audición, le ofrecieran una parte en “Twas the Night Before…”.
“La presentamos y la guiamos por diferentes lugares donde tiene que conocer a distintos personajes. Nosotros nos quedamos en el escenario y hacemos las danzas; hay muchos momentos de pantomima en los que realmente usamos nuestro niño interior para emocionarnos y expresarnos con todas estas diferentes danzas. Es muy divertido ser parte de este espectáculo”, compartió.
Además la audiencia reconocerá la música navideña, ya que compartió Cruz Colón, las canciones son clásicos de la temporada reinterpretados por Cirque Du Soleil, y que aunadas con las acrobacias, vestuario y utilería del espectáculo, no sólo hacen eco de la nostalgia por lo clásico, sino que hace que la audiencia tenga un momento feliz y muy acorde a la temporada de fiestas.
“También le permite al público conectar con su niño interior; nosotros, como bailarines, lo hacemos. Todo es muy genuino y juguetón. Viendo y siendo parte de este espectáculo, la magia de Cirque me inspira a ser parte de su magia y transmitirla a otras personas, tanto niños como adultos. Es algo especial”, aseguró.
Cada noche, agregó Cruz Colón, hay nervios y, con sus compañeros antes de salir al escenario, tienen una especie de ritual para estar listos, emocionarse y emocionar al público.
“Mi personaje ya tiene esa emoción y dicha; la belleza es compartirla con el público y a la vez, como equipo tenemos la dedicación y cuidado para hacerles pasar un rato especial haciendo contacto visual con ellos y ver sus reacciones. Hay muchas sonrisas; escuchar su reacción nos da más energía”, aseguró.