Más de 200 hombres y mujeres dicen que fueron abusados sexualmente cuando eran niños en los centros de detención de menores de Illinois, uniéndose a cientos de otros que previamente se unieron a las demandas.
El lunes se presentaron tres nuevas demandas que describen “una cultura de abuso sexual” en los centros juveniles de Illinois entre 1996 y 2021, la última de una serie de demandas presentadas el año pasado.
Desde mayo, 667 personas se han unido a demandas que alegan abuso sexual en centros de todo el estado, según los abogados que representan a los demandantes.
Las demandas incluyen acusaciones de violación, agresión y abuso emocional por parte de funcionarios penitenciarios, maestros, capellanes y otros.
Uno de los denunciantes, Khadafi Muhammad, dijo dos décadas después que todavía tiene pesadillas sobre el abuso que sufrió en los Centros Juveniles de Illinois.
“Yo tenía solo 15 años cuando comenzó”, dijo Muhammad, de 37 años, a los periodistas el martes. “Me sentí asustado y confundido, y mi abuso afectó mis relaciones con las personas que me rodeaban… Rezo para que esto nunca le vuelva a pasar a nadie”.
Una de las demandas presentadas el lunes tiene 222 denunciantes, incluido Muhammad, y se enfoca en nueve centros juveniles estatales de Illinois. Cinco de esas instalaciones están ahora cerradas.
La demanda también nombra al Departamento de Correcciones de Illinois y al Departamento de Justicia Juvenil como demandados y solicita daños y perjuicios de $2 millones por demandante.
El Departamento de Justicia Juvenil de Illinois dijo que está al tanto de las demandas y, aunque los funcionarios se negaron a hacer comentarios sobre el litigio activo, la agencia “se toma en serio la seguridad de los jóvenes a cargo del Departamento”.
El Departamento de Correcciones de Illinois no respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios.
Esta demanda alega que el estado sabía del abuso durante décadas y “sin embargo, se olvidó de proteger a sus jóvenes confinados del abuso sexual y no implementó las políticas necesarias para garantizar dicha protección”.
Hay varios presuntos delincuentes nombrados en la demanda, muchos de los cuales ya han sido condenados por delitos sexuales. Una persona nombrada sigue empleada en el sistema de justicia juvenil, según los abogados.
Algunos delincuentes sólo son identificados por apodos o descripciones físicas, y hay por lo menos una docena acusados de abusar de más de un niño, según la demanda.
Múltiples denunciantes dijeron que fueron abusados sexualmente por un capellán de St. Charles, que amenazó con mantener a un niño en los Centros Juveniles de Illinois hasta que tuviera 21 años si se oponía al abuso. Otros abusadores amenazaron con medidas disciplinarias o confinamiento solitario si los niños se resistían al abuso, dice la demanda.
Los acusados observan mientras el abogado Jerome Block habla durante una conferencia de prensa en el Loop sobre las nuevas demandas en nombre de presuntas víctimas de abuso sexual en los Centros Juveniles de Illinois operados por el estado y el Centro de Detención Temporal Juvenil del Condado de Cook, el martes 24 de septiembre de 2024.
Ashlee Rezin/Sun-Times
Una segunda demanda presentada el lunes se centra en casi 50 casos de abuso en el Centro de Detención Juvenil Temporal del Condado de Cook, anteriormente conocido como el Hogar Arthur J Audy. La demanda solicita más de $100,000 en daños para cada denunciante.
Un grupo entre esas 50 personas también han presentado una tercera demanda contra el estado, porque su abuso ocurrió durante un período de tiempo en el que el estado tenía cierta responsabilidad por la instalación del condado, según los abogados.
Las oficinas de la presidenta de la Junta del Condado de Cook y el juez principal de la Corte de Circuito del Condado de Cook se negaron a hacer comentarios sobre litigios pendientes.
Durante más de dos décadas, el Centro de Detención Temporal Juvenil del Condado de Cook ha estado envuelto en controversias. En 1999, una demanda colectiva federal alegó que las condiciones eran sucias y que el centro estaba sobrepoblado y contaba con poco personal. En 2007, un administrador designado por la corte fue encargado de llevar el centro de menores hacia “los estándares exigidos por la constitución”.
Un informe de 2022 de un grupo de expertos en justicia juvenil convocado por el juez principal del Condado de Cook, Timothy Evans, concluyó que el centro de menores era “aislante y privativo”, en lugar de rehabilitador, ya que encerraba a los niños en sus celdas durante la mayor parte del día.
El grupo determinó que el centro de menores debería cerrarse permanentemente y reemplazarse con instalaciones comunitarias más pequeñas enfocadas en la rehabilitación.
Traducido por La Voz Chicago